La casa del cronista

Así nació El Vigía La casa del cronista

JOSÉ RAMÓN CONTRERAS B.

contrerasjr2003@hotmaü. com

Resulta contraproducente tener que titular la nota de Esta semana de esta mane­ra, pero, se debe hacer justicia con las personas que entregan parte de su existencia a la ardua labor de recopilar la historia de los pueblos, de sus primeros habitantes, máxi­me, el caso nuestro, una ciudad de pocos años, con una diversidad cul­tural producto de las diferentes razas que a ella llegaron, para que­darse y echar familias en estas prós­peras tierras del Sur del Lago de Maracaibo. El Profesor Delibrando Várela, es un humilde habitante de El Vigía de "a pie", que devenga una bonificación por parte de la Alcaldía del municipio Alberto Adriani, que no llega al salario mínimo establecido para un traba­jador venezolano, en su humilde morada del barrio Inmaculada habi­ta con una parte de sus hermanos, allí hemos observado una gran can­tidad de documentos históricos que este educador jubilado por el Esta­do venezolano recopila, sin el cuido que esta labor amerita. Ya es hora de que la municipalidad le dote de una vivienda, que bien podría ser la Casa del Cronista, allí mismo funcionaría su despacho y los valiosos archivos de la ciudad, hasta que el creador disponga de su humanidad. La vida de los escritores, poetas, pintores, novelistas e historiadores no posee una holgura económica, está füll de sabiduría y conocimien­tos, para ser entregados a esa juven­tud que vive ávida de historia en las instituciones del país y, que todos los días nos exige que facilitemos en sus aulas y auditorios parte de esas anécdotas e historias que vivieron y patentaron nuestros ante­pasados. Por estos días, a finales del año fiscal 2.014, los ediles adrianistas empezarán a legislar sobre la Ordenanza de Presupuesto para el venidero 2015, sería factible que tomen en cuenta esta humilde propuesta y, en un lote de terreno que se encuentra casualmente al frente del edificio de la Alcaldía, diagonal a una agencia bancaria, en plena avenida Bolívar, propiedad del municipio, se presupueste la construcción de la Casa del Cronis­ta. Edificación que puede albergar el Archivo Histórico de la ciudad y la residencia de nuestro cronista. Las generaciones de relevo se lo agradecerán, constituyendo el mejor aguinaldo para quienes nos preocupamos por la historia de este pueblo del eje panamericano y Sur del Lago de Maracaibo.