Trozos de
nuestra historia
Así nació El Vigía
JOSÉ RAMÓN CONTRERAS B.
Docente y
periodista
El
personaje popular que hoy presentaremos a
nuestros amables lectores no es otro que "Enrique
y la burra". Pido disculpas por omitir su apellido, pero, por
mucho que hemos indagado no ha sido posible lograr el mismo. Su sitio habitual de permanencia era la plaza Alberto Adriani de nuestra
estratégica ciudad, quizás se debe a que, tiempos atrás, mucho antes de construir la Avenida Bolívar, me refiero, cuando la nomenclatura nuestra nos la presentaba como la calle 6 y, justamente al frente, estaba ubicada la plaza de los Plataneros, en terrenos que fueron propiedad de don Alfonso Ferreira y su Bomba El As, una vez trasladada para el sector de la Laguna de Los Sapos, en el Barrio Inmaculada, Enrique siguió pululando la Plaza, del epónimo de nuestro municipio, allí
|
lustraba
zapatos, empinaba el codo, hacía mandados a los vecinos y
comerciantes del sector.
El personaje en cuestión era una
persona de muy buen carácter, de poco hablar, y cuando lo hacía
era pausadamente, sin elevar en ningún momento el timbre de
su afónica voz, no se mostraba ofendido ante el apodo endilgado,
presentaba un ligero retardo mental. Sin embargo, en los últimos
meses de su errante vida, dio muestras de incomodidad ante el alias
de "Enrique y la burra". Comentan los lugareños que todo se
debió a su predilección hacia este noble animal. Por esta temporada,
un amigo de nombre Luis Játiva le donaba trajes, zapatos
y corbatas, que lucia con orgullo en su lugar predilecto para
recibir la navidad, la Plaza Alberto Adriani. Para la fecha en que murió, debió
haber estado frisando los 68 años de edad y
sus restos reposan en el Cementerio de Santa Isabel de
En
una próxima entrega les estaré comentando sobre "camburito",
otro de los personajes que formaron parte de la historia de
aquella época.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario